Cuando la salud limita tus capacidades laborales, dar el paso hacia una incapacidad permanente puede brindarte estabilidad.

 

Nuestra guía está diseñada para que entiendas el proceso sin complicaciones.

 

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Lorena Prieto Rivera
Escrito por:
Lorena Prieto Rivera
Abogada experta en incapacidad permanente
Update: 15/01/2025
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La hipertensión pulmonar (HP) es una enfermedad en la que la presión en las arterias pulmonares, que llevan la sangre del corazón a los pulmones, está anormalmente alta. Esto puede causar que el corazón tenga que trabajar más para bombear sangre a través de los pulmones. La hipertensión pulmonar puede ser causada por varias condiciones, como enfermedades cardíacas, enfermedades pulmonares crónicas, o puede ser idiopática (sin causa conocida).

 

La dificultad para respirar y la fatiga pueden limitar la capacidad de realizar tareas físicas. Esto puede ser especialmente relevante en trabajos que requieren esfuerzo físico o que implican estar de pie durante períodos prolongados. Por eso puede ser tan limitante, y causar incapacidad permanente en los peores casos.

 

 

Tipos y Grados de Incapacidad Laboral por Hipertensión Pulmonar

La hipertensión pulmonar puede limitar significativamente la capacidad para trabajar, con distintos grados de incapacidad dependiendo de la severidad de los síntomas y el impacto en la vida diaria. A continuación se detallan los tipos de incapacidad laboral asociados con esta enfermedad.

Incapacidad Parcial

Este grado implica una reducción del rendimiento laboral de al menos un 33%. Los síntomas de la hipertensión pulmonar, como la fatiga y la dificultad para respirar, pueden disminuir la eficiencia en el trabajo, afectando la capacidad para completar tareas con la misma eficacia que antes.

Incapacidad Permanente Total

En este caso, la hipertensión pulmonar causa una imposibilidad de realizar el trabajo habitual. Los empleados afectados pueden experimentar síntomas graves que interfieren con sus funciones laborales diarias, impidiendo el desempeño de sus responsabilidades profesionales de manera efectiva.

Incapacidad Permanente Total Calificada

Para individuos mayores de 55 años, la hipertensión pulmonar puede causar un incremento del 20% en la incapacidad laboral, debido al desgaste adicional en el cuerpo con la edad. Este grado de incapacidad refleja la pérdida significativa de capacidad laboral por la enfermedad en combinación con la edad avanzada.

Incapacidad Permanente Absoluta

Este tipo de incapacidad implica la imposibilidad de realizar cualquier tipo de trabajo debido a la hipertensión pulmonar severa. La condición puede ser tan debilitante que la persona no puede participar en actividades laborales en absoluto, independientemente del tipo de trabajo, por ejemplo, cuando concurre fatiga severa debido a la falta de aire y ello impide realizar incluso las tareas más livianas.

Gran Invalidez

Las personas con gran invalidez debido a hipertensión pulmonar requieren asistencia constante para las actividades básicas de la vida diaria, como comer, vestirse o moverse. La gravedad de los síntomas puede hacer que la persona dependa completamente de otros para manejar sus necesidades cotidianas.

 

Requisitos para solicitar la incapacidad permanente por hipertensión pulmonar

  • Diagnóstico Médico. El diagnóstico médico ha de ser claro y detallado. Este diagnóstico debe incluir pruebas de presión arterial pulmonar elevada, como ecocardiogramas y pruebas de función pulmonar, análisis de sangre, radiografía de tórax o bien resonancias magnéticas, así como la evaluación de síntomas y su impacto en la capacidad funcional del paciente.
  • Cotización Mínima. Para las personas menores de 31 años, se debe haber cotizado al sistema de seguridad social al menos un tercio del tiempo desde los 16 años. Para los mayores de 31 años, se requiere haber contribuido durante al menos un cuarto del tiempo desde los 20 años, con al menos cinco años de aportaciones, de las cuales al menos el 20% deben haberse realizado en los últimos diez.
  • Documentación Necesaria. Los informes médicos necesarios deben documentar la severidad de la hipertensión pulmonar y su impacto en la vida diaria. Esto incluye informes de cardiólogos y neumólogos que detallen la limitación funcional, la respuesta a tratamientos y la necesidad de intervenciones continuas. La evidencia médica debe demostrar cómo la condición afecta la capacidad para realizar tareas laborales.

Procedimiento para Solicitar Incapacidad por hipertensión pulmonar

La hipertensión pulmonar puede afectar profundamente la capacidad laboral, requiriendo un procedimiento formal para solicitar incapacidad. A continuación, se detallan los pasos necesarios para llevar a cabo esta solicitud.

  • Inicio del Proceso. El proceso debe comenzar cuando la hipertensión pulmonar interfiere notablemente con la capacidad de trabajar, y el individuo se encuentra de baja médica. Es fundamental demostrar que los síntomas, como dificultad para respirar y fatiga severa, están afectando significativamente el desempeño laboral.
  • Documentación Médica. Es esencial reunir toda la documentación médica pertinente. Esto incluye un diagnóstico confirmado de hipertensión pulmonar por un especialista, informes de pruebas relevantes como ecocardiogramas, resultados de pruebas de función pulmonar y evaluaciones de la capacidad funcional que evidencien el impacto de la enfermedad en el desempeño laboral.
  • Reclamación. Si la solicitud es rechazada, se puede presentar una reclamación ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social. Se deben adjuntar informes médicos exhaustivos que evidencien la gravedad de la hipertensión pulmonar y su efecto en la capacidad laboral.
  • Vía Judicial. En caso de rechazo de la reclamación, se puede recurrir a los tribunales de lo Social. Se recomienda contratar a un abogado especializado en incapacidad para garantizar una adecuada representación y asesoramiento durante el proceso judicial.

Plazos y Tiempos

El INSS dispone de un plazo de 135 días para emitir una resolución sobre la solicitud de incapacidad. En ausencia de una respuesta en este período, se considera que la solicitud ha sido rechazada mediante la figura del silencio administrativo.

Al recibir la resolución, el solicitante cuenta con 30 días hábiles para presentar una reclamación administrativa previa. Si la reclamación es desestimada, el solicitante tiene un plazo de 30 días hábiles para presentar una demanda ante los tribunales correspondientes.

 

Evaluación de la Hipertensión Pulmonar

La evaluación de la hipertensión pulmonar es crucial para determinar el impacto de la enfermedad en la capacidad laboral. Esta evaluación considera tanto los aspectos médicos como funcionales para establecer el grado de incapacidad del paciente.

Se evaluarán, asimismo, los tratamientos instaurados (anticoagulantes, terapia de oxígeno…).

Evaluación Funcional

La evaluación funcional examina cómo la hipertensión pulmonar afecta las actividades diarias del paciente. Se analizan la capacidad para realizar tareas físicas y la limitación en el desempeño laboral, teniendo en cuenta la gravedad de los síntomas como dificultad para respirar y fatiga extrema.

En ocasiones se derivan otras complicaciones como anemia, arritmias, coágulos en la sangre… por lo que todo ello debe ser tenido en cuenta.

Tribunal Médico

El tribunal médico revisa los informes médicos y las evaluaciones funcionales para determinar el grado de incapacidad por hipertensión pulmonar.

Este tribunal tiene en cuenta el impacto de la enfermedad en la capacidad laboral del paciente y si esta afecta su habilidad para realizar trabajos habituales o cualquier tipo de trabajo.

 

Baja Laboral por Hipertensión Pulmonar

La baja laboral debido a hipertensión pulmonar puede ser prolongada, dependiendo de la severidad de la enfermedad. La incapacidad puede requerir un tiempo prolongado para recibir tratamiento adecuado y adaptarse a las limitaciones impuestas por la enfermedad, afectando significativamente la capacidad de trabajo del paciente.

 

Recomendaciones

Para gestionar la incapacidad laboral por hipertensión pulmonar, es fundamental seguir ciertas recomendaciones para asegurar un proceso adecuado y la obtención de los derechos correspondientes.

Documentación

Se debe recopilar toda la documentación médica relevante, incluidos informes de especialistas, resultados de pruebas y evaluaciones funcionales. Esta documentación es esencial para justificar la solicitud de incapacidad y demostrar cómo la hipertensión pulmonar afecta al desempeño laboral.

Consultar con un abogado de incapacidades es crucial. Un profesional con experiencia puede guiar al paciente a través del proceso legal, asegurando que se cumplan todos los requisitos y se maximicen las posibilidades de obtener una compensación adecuada.

Casos Reales

Aquí presentamos auténticos casos reales de personas con hipertensión pulmonar que han pasado por el proceso de solicitud de incapacidad. Estos casos ilustran las diversas situaciones y cómo se ha manejado la incapacidad laboral en contextos similares, ofreciendo ejemplos prácticos y lecciones aprendidas.

 

En Toro Abogados contamos con amplia experiencia en la obtención de incapacidades permanentes por hipertensión pulmonar. Así, la Sentencia dictada por el Juzgado de lo Social núm. 9 de Barcelona en fecha 6 de febrero de 2018 reconoció a nuestro cliente en situación de incapacidad permanente absoluta para todo tipo de trabajo.

 

El trabajador presentaba hipertensión pulmonar moderada que requería tratamiento anticoagulante y que junto a otras patologías hacían inviable el llevar a cabo cualquier actividad laboral, por liviana que sea.