Enfrentar una enfermedad que limita tu vida laboral no tiene por qué ser un desafío solitario.
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La sordera es una condición en la que una persona tiene una disminución parcial o total de la capacidad auditiva. Puede ser congénita, es decir, presente al nacer, o adquirida a lo largo de la vida. La sordera puede afectar a uno o ambos oídos y ser temporal o permanente.
Esta afección tiene un impacto significativo en la vida de una persona, ya que puede dificultar la comunicación, el aprendizaje y la participación en actividades sociales. Sin embargo, existen diversas opciones de tratamiento y dispositivos de ayuda auditiva, como audífonos e implantes cocleares, que pueden ayudar a las personas sordas a mejorar su audición y calidad de vida. En algunos casos, es causa de incapacidad laboral temporal e incluso incapacidad permanente.
Tipos y Grados de Incapacidad Laboral por Sordera (pérdida de audición, hipoacusia)
La hipoacusia, o pérdida de audición, puede limitar el desempeño laboral en diferentes grados. Según la gravedad de la sordera y la presencia de otras condiciones, se pueden clasificar distintos tipos de incapacidad, y debe ser una sordera adquirida o agravada una vez el trabajador ha iniciado su vida laboral.
Incapacidad Parcial
Esta implica una reducción mínima del 33% en el rendimiento laboral. Aunque el trabajador sigue activo, su eficiencia disminuye, especialmente en tareas que requieren una audición precisa, lo que afecta su productividad, siendo necesaria una adaptación de su puesto de trabajo ante la imposibilidad de realizar esta actividad en concreto.
Incapacidad Permanente Total
La pérdida auditiva impide seguir desempeñando el empleo habitual. Aunque la persona puede realizar otras funciones, el trabajo principal ya no es viable debido a la gravedad de la sordera, lo que genera una incapacidad total para la realización de su actividad laboral.
Este grado de incapacidad lo encontramos en profesiones de cara al público donde la interacción con compañeros o terceros es necesaria en todo caso.
Incapacidad Permanente Total Cualificada
Destinada a mayores de 55 años, esta categoría otorga un aumento del 20% en la pensión. La edad y la dificultad de acceder a un nuevo empleo tras la pérdida auditiva agravan la situación laboral, justificando este apoyo adicional.
Incapacidad Permanente Absoluta
Para obtener esta clasificación, además de la sordera bilateral, es necesario padecer otras enfermedades o dolencias que imposibiliten realizar cualquier tipo de trabajo. La combinación de problemas de salud incapacita completamente a la persona para el mundo laboral.
Gran Invalidez
Este grado se otorga cuando la sordera se combina con otras enfermedades graves que requieren la ayuda constante de terceros para actividades básicas. La incapacidad es total, tanto en el ámbito laboral como en la vida diaria, exigiendo asistencia continua.
Requisitos para solicitar la incapacidad permanente por sordera
- Diagnóstico Médico: Se requiere un diagnóstico confirmado por un otorrinolaringólogo, respaldado por pruebas auditivas (audiometrías) que certifiquen el nivel de pérdida auditiva y su impacto en la capacidad para trabajar.
- Cotización Mínima: Los menores de 31 años deben haber cotizado al menos un tercio del tiempo desde los 16 años. Para mayores de 31, se exige haber cotizado un cuarto del tiempo desde los 20 años, con un mínimo de cinco años en total. En caso de que derive de un accidente de trabajo o enfermedad profesional, no es necesario periodo de cotización previo.
- Documentación: Se deben presentar informes detallados del médico especialista en otorrinolaringología, indicando el grado de sordera, tratamientos realizados, imposibilidad de mejoría con audífonos y cómo afecta las actividades laborales. También son clave los resultados de audiometrías, que evidencian la severidad de la pérdida auditiva.
Procedimiento para solicitar incapacidad por sordera
Solicitar una incapacidad permanente por pérdida auditiva implica cumplir una serie de pasos y presentar pruebas que demuestren el impacto de la sordera en la capacidad para trabajar.
- Inicio del Proceso: Es fundamental que la solicitud se presente estando de baja médica o en una situación asimilada al alta debido a la pérdida auditiva.
- Informe Médico: Se requiere documentación de un especialista en audición, como un otorrinolaringólogo, junto con pruebas auditivas (audiometrías), que demuestren el nivel de sordera y cómo esta afecta el desempeño laboral.
- Recurso: Si la solicitud es rechazada, es posible interponer un recurso. Es importante adjuntar nuevos informes médicos que detallen de forma clara el impacto de la pérdida auditiva en la vida profesional.
- Vía Judicial: Si el recurso no prospera, el último paso es llevar el caso a los tribunales. Contar con un abogado especializado en incapacidades aumenta las posibilidades de éxito.

Plazos y Tiempos
El Instituto Nacional de la Seguridad Social tiene un plazo de 135 días para resolver acerca de la incapacidad. Si no emite una decisión dentro de ese período, la solicitud ha sido rechazada por silencio administrativo.
En ese supuesto, se dispone de 30 días hábiles para interponer una reclamación, la cual puede incluir información adicional o nueva evidencia. Si la reclamación también es desestimada, el siguiente paso es presentar el caso ante los tribunales en un plazo de 30 días hábiles.
Evaluación de la sordera
Para comprender la gravedad de la pérdida auditiva y su impacto en la vida cotidiana, es fundamental realizar una evaluación completa. Este proceso determina cómo la sordera afecta la capacidad para desempeñar tareas laborales y diarias.
Evaluación Funcional
En este punto, se realiza una evaluación funcional para medir cómo la pérdida auditiva afecta el desempeño del individuo en diversas actividades. Esta evaluación examina tanto la capacidad de comunicación como la interacción en entornos laborales.
Tribunal Médico
El tribunal médico es el encargado de revisar la información recopilada y determinar el grado de incapacidad. Su función es valorar el impacto de la pérdida auditiva en el desempeño laboral y en la vida diaria del solicitante.
Baja Laboral por sordera
La duración de una baja laboral debido a la sordera puede variar ampliamente. En algunos casos, puede extenderse por más de un año, dependiendo de la gravedad de la pérdida auditiva y la capacidad de adaptación del trabajador.
Recomendaciones
Para asegurar una evaluación precisa y efectiva, se recomienda seguir las indicaciones médicas y realizar pruebas auditivas detalladas. Estas recomendaciones ayudan a obtener una valoración clara del impacto de la sordera en la capacidad laboral.
Documentación Necesaria
Se requiere presentar informes médicos detallados que describan la pérdida auditiva y su impacto funcional. Estos documentos deben incluir resultados de audiometrías y evaluaciones de especialistas en audición.
Asesoramiento Legal
Un abogado de incapacidad puede ofrecer orientación crucial durante el proceso. Su experiencia es fundamental para navegar por las complejidades legales y asegurar que se protejan los derechos del solicitante.
Casos Precedentes
Revisar casos de éxito anteriores puede proporcionar una perspectiva valiosa. Analizar cómo se han resuelto situaciones similares ayuda a comprender mejor el proceso y las estrategias efectivas para obtener la incapacidad.