La reclamación de los gastos médicos tras un accidente de tráfico constituye un aspecto fundamental en el proceso de indemnización que debe asumir la aseguradora. Estos gastos, intrínsecamente ligados a la naturaleza del accidente y las lesiones sufridas, representan una parte esencial de la compensación que se busca obtener. Sin embargo, a pesar de su importancia, es común que las víctimas se enfrenten a la incertidumbre respecto a qué conceptos pueden reclamar específicamente por estos gastos y cómo se gestionan los procedimientos para su cobertura. Aquí te lo contamos.

¿Qué son los gastos médicos en un accidente de tráfico?

Los gastos médicos tras un accidente de tráfico engloban todos los costes debidos a la atención médica necesaria para tratar las lesiones sufridas como resultado del incidente. Estos gastos varían considerablemente según la gravedad de las lesiones y el tipo de tratamiento requerido. Sin ser una lista excluyente (en temas médicos, nada es absoluto, ya que cada caso es único), los más habituales son los siguientes:

¿Quién puede reclamar los gastos médicos?

Los gastos médicos tras un accidente de tráfico pueden ser reclamados por varias partes involucradas en el incidente. Así, nos referimos mayoritariamente a los conductores que estuvieron presentes en el accidente, pero también a los pasajeros que viajaban en los vehículos afectados.

Además, peatones o ciclistas que resultaron heridos como consecuencia del accidente también tienen derecho a reclamar estos gastos médicos.

Pasos para reclamar los gastos médicos

Después de verse involucrado en un accidente de tráfico, reclamar los gastos médicos agota a cualquiera. Lo mejor es delegar en abogados de accidentes, que se encargan de todo desde el primer minuto.

Recopilar toda la documentación médica

Como es lógico, lo primero es acreditar las lesiones y su alcance. Esto se hace mediante los documentos médicos pertinentes, que describan las lesiones, tratamientos recibidos, diagnósticos, y cualquier otra información relevante proporcionada por los profesionales de la salud.

Además, es importante conservar todas las facturas y recibos relacionados con los servicios médicos:

Notificar el accidente a la aseguradora

Tan pronto como sea posible después del accidente, debes informar a tu compañía de seguros sobre lo ocurrido. Proporciona detalles precisos sobre la fecha, hora y lugar del accidente, así como cualquier lesión sufrida por ti u otros involucrados.

Cuanto antes notifiques el accidente, mejor, ya que esto permite que el proceso de reclamación se agilice, y consecuentemente, se cobre antes.

Solicitar una peritación médica

La finalidad de esta peritación es proporcionar una evaluación imparcial de tus lesiones y el tratamiento necesario, lo que puede ayudar a respaldar tu reclamación ante la compañía de seguros y garantizar que recibas una indemnización adecuada por tus gastos médicos. Este trámite es necesario sobre todo cuando se llega a la vía judicial, y es necesario demostrar con fuerza lo que se está reclamando.

Negociar con la aseguradora

El punto fuerte de los mejores profesionales en la reclamación de accidentes. Durante este proceso, una comunicación abierta y constructiva con el seguro ayuda, y también proporcionar cualquier información que pueda ser requerida para respaldar tu reclamación. Si no es posible, habrá que acudir al siguiente paso, la vía judicial.

Reclamar judicialmente

En ocasiones, los tratamientos médicos no suman cantidades grandes, pero otras veces son varios miles de euros, sobre todo en accidentes graves. En esos casos, los seguros ponen más trabas. Su beneficio está en negar sistemáticamente las indemnizaciones. Por eso, ante las reiteradas negativas, se hace preciso reclamarlo ante los juzgados, con un abogado de accidentes.

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