¿Qué es el contrato por circunstancias de producción?

El contrato de carácter temporal por circunstancias de la producción, también denominado contrato eventual por circunstancias de la producción, es una modalidad contractual que posibilita a las organizaciones contratar personal por un período específico para atender un incremento no anticipado de la actividad empresarial.

Este tipo de contrato temporal se ajusta a las necesidades coyunturales de las empresas y les permite contar con recursos humanos adicionales durante el lapso requerido. Este tipo de contrato se rige por la normativa laboral vigente y requiere de un acuerdo entre la empresa y el trabajador, estableciendo las condiciones específicas de duración, funciones y remuneración.

 

 

Características del contrato por circunstancias de la producción

En el caso de los contratos temporales por circunstancias de la producción, es fundamental que las causas que justifican su firma sean detalladas de manera concreta en el propio contrato. Las empresas que usan estos contratos, deben informar sobre la previsión anual a los representantes legales de los trabajadores.

Es importante tener en cuenta que los contratos temporales con una duración inferior a 30 días están sujetos a penalizaciones legales. Cuando termina un contrato temporal por circunstancias de la producción, el trabajador tiene derecho a recibir una indemnización equivalente a una parte proporcional de la cantidad que resultaría de contar 12 días de salario por cada año de servicio.

Circunstancias que justifican los contratos por circunstancias de la producción

Los contratos temporales por circunstancias de la producción son utilizados por las empresas para hacer frente a situaciones específicas que pueden surgir en su actividad. Hablamos tanto de incrementos puntuales e imprevisibles de la actividad como oscilaciones en la demanda, como de incrementos puntuales y previsibles de la demanda.

En el primer caso, cuando se produce un aumento puntual e imprevisible de la actividad, las empresas pueden recurrir a este tipo de contrato para contratar personal adicional y satisfacer la demanda temporal. Por ejemplo, si se presenta una situación inesperada que requiere una mayor producción o prestación de servicios durante un período limitado.

En el segundo caso, cuando se prevé un incremento puntual en la demanda, las empresas también pueden utilizar este tipo de contrato para cubrir las necesidades temporales. El periodo veraniego en el sector turístico es un buen ejemplo.

 

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¿Cuánto dura el contrato temporal por circunstancias de la producción?

Cuando el contrato tenga como fundamento las mencionadas circunstancias de la producción, su duración estará limitada a un plazo máximo de seis meses. Sin embargo, mediante un convenio colectivo de ámbito sectorial, este periodo se podrá extender dicho plazo hasta un año.

Si el contrato se ha acordado por un período inferior al máximo legal o establecido en el convenio, podrá prorrogarse una sola vez, mediante acuerdo entre ambas partes, siempre y cuando la duración total del contrato no supere dicha duración máxima establecida.

Se considera que el contrato ha sido celebrado de manera fraudulenta y, por ende, la relación laboral se presume como indefinida en los siguientes casos:

  1. El contrato no ha sido formalizado por escrito y su duración supera las 4 semanas.
  2. Se ha excedido la duración máxima establecida en el Estatuto de los Trabajadores o en el convenio colectivo correspondiente.
  3. La causa del contrato no es temporal, sino más bien indefinida o de carácter estructural.

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