La prolongación de la baja médica se puede lograr mediante la demora en la calificación cuando alcanza los 18 meses, cuando el Instituto Nacional de la Seguridad Social estime que existe una posibilidad de recuperación. La finalidad es brindar al trabajador la oportunidad de recuperarse en este plazo, siguiendo el tratamiento y agotando las opciones terapéuticas.

Es importante destacar que la demora en la calificación es una medida que rara vez se otorga, siendo más común que el INSS opte por conceder el alta médica o iniciar un proceso de incapacidad. En determinados casos, cuando existen indicios de mejoría y el tratamiento puede surtir efecto, esta opción puede considerarse para favorecer la recuperación integral del trabajador.

 

 

¿Cuánto dura la demora de calificación?

Dentro del marco legal, se establece un periodo máximo de duración de 18 meses, o 545 días, que abarca tanto el tiempo inicial de la baja médica como las posibles recaídas que puedan surgir durante ese lapso. Sin embargo, en situaciones excepcionales y con base en circunstancias particulares, este plazo límite puede ser prorrogado por un periodo adicional de 180 días, alcanzando un total de dos años.

Esta decisión se toma con el objetivo de permitir una recuperación óptima y completa antes de tomar una determinación definitiva en cuanto a incapacidad laboral. Cabe mencionar que la demora de calificación y la prórroga de la duración de la baja médica son situaciones excepcionales y su concesión está sujeta a una valoración rigurosa y exhaustiva por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social. Este organismo evaluará la evolución del estado de salud del trabajador, los informes médicos, tratamientos recibidos y demás factores relevantes antes de tomar una decisión final.

¿Quién paga en la demora de calificación?

Durante el periodo de demora de calificación, el trabajador seguirá percibiendo el mismo importe que venía cobrando por incapacidad temporal hasta entonces. En función de la entidad que esté encargada de gestionar el pago, ya sea la Seguridad Social o la Mutua, se efectuará el desembolso correspondiente.

La demora de calificación no implica una modificación en los ingresos que el trabajador estaba recibiendo por su incapacidad temporal. Esta continuidad en los pagos brinda una seguridad económica mientras se lleva a cabo el proceso de evaluación de la incapacidad laboral.

Carta de demora de calificación

El Instituto Nacional de la Seguridad Social opta por notificarlas mediante un mensaje de texto (SMS) al número registrado en su expediente. Según las disposiciones legales, aproximadamente a los 12 meses desde el inicio de la incapacidad temporal, el trabajador debería ser citado para someterse a una revisión médica.

No obstante, es común que transcurran más meses sin que el trabajador reciba noticias de la Seguridad Social.

No me han notificado la demora de calificación

La notificación expresa de la demora en la calificación es un aspecto fundamental en la tramitación de procesos, sin embargo, en ocasiones, debido a retrasos internos en la propia gestión, el tiempo en que se realiza dicha notificación puede dilatarse. La transparencia y la comunicación efectiva son clave para mantener a todas las partes involucradas informadas sobre cualquier demora o cambio en el proceso.

Sería interesante que se implementasen medidas para mitigar los retrasos en la gestión interna, a fin de garantizar una pronta resolución de los procesos y evitar dilaciones innecesarias en la notificación. La eficiencia en la gestión es esencial para mantener la confianza en el sistema y asegurar que los plazos y procedimientos sean respetados adecuadamente. Sin embargo, no hay que preocuparse ya que la Seguridad Social siempre notifica y es diligente tanto en la gestión como en la notificación.

¿Qué ocurre después de la demora de calificación?

Una vez concluido el período de espera acordado por el INSS, se procede a citar nuevamente a la persona ante el Tribunal Médico. En este momento, resulta vital presentar informes médicos recientes, ya que estos pueden ser determinantes para obtener la incapacidad permanente en caso de que no se haya logrado la curación esperada.

 

 

Los informes actualizados ofrecen una visión más precisa de la situación de salud en el momento de la evaluación y respaldan la solicitud de incapacidad al proporcionar información detallada sobre el estado de salud actual y su impacto en la capacidad laboral. Es esencial incluir cualquier estudio, tratamiento o terapia reciente que pueda influir en la decisión del Tribunal Médico. Presentar informes médicos actualizados es una estrategia clave para respaldar la solicitud de incapacidad y garantizar una evaluación bien fundamentada.

PRIMERA VISITA GRATIS

Sin ningún tipo de compromiso, te aconsejaremos sobre tus mejores opciones.







    Compartir: